Desde la ruta circular costera que viene de El Médano parte este sendero que asciende directamente hasta la cumbre. La primera parte del camino atraviesa una zona de singulares formaciones de arenas llamadas “sismitas”, que constituyen huella fósil de seísmos producidos hace varios miles de años.
En el ascenso le acompañará constantemente la visión de la montaña con su característico color rojizo debido a los piroclastos basálticos que la componen, contrastado con una colorida vegetación que va cambiando hasta llegar a la cumbre dominada esencialmente por tabaibas dulces con un porte rastrero debido a la presencia constante del Alisio.
Desde la cima del volcán, a 171 metros de altitud, podrá apreciar unas espectaculares vistas de toda la geografía sur de la isla, desde la Punta de Rasca, pasando por el pico del Teide, hasta Montaña Pelada, al otro lado de El Médano.
También podrá apreciar la singular playa de arena fina de La Tejita en la base del lado oeste de la montaña, así como el flanco sur de Montaña Roja con cantiles abruptos de hasta 40 metros, formados por la acción erosiva del mar, lugar donde anida la pardela cenicienta.
Tras el descenso de la montaña podrá disfrutar de un baño en las espectaculares playas que rodean este entorno natural.